Key Executive es una consultora valenciana de estrategia y operaciones de recursos humanos, especializada en el outplacement y programas de recolocación en los expedientes de regulación de empleo (ERE) de grandes compañías. En sus 16 años de experiencia, la consultora se ha afianzado en el ámbito nacional, expandiéndose también al internacional en países como Inglaterra, Francia o Suiza con diferentes partners.

Actualmente, gestiona la recolocación de los afectados por ERE de una gran empresa de Castellón, con “gran éxito del programa” según explica la socia directora de Key Executive, Anabel Morraja en una entrevista a Economía 3. Grandes compañías, principalmente de sectores como el agroalimentario, el metal y los servicios, son sus principales clientes, cuyos nombres prefiere no desvelar por el contrato de confidencialidad. En años anteriores se encargó, por ejemplo, del plan de recolocación del Banco de València.

Directores generales, comerciales o financieros, son perfiles muy demandados en los procesos de recolocación, siendo los mayores de 55 años y sin estudios los que presentan más dificultad de reincorporación al mundo laboral, principalmente de sectores que se están transformando. “No es tanto por la edad, si no por la formación y la experiencia. No obstante, si un candidato, de esa edad, por sí mismo busca trabajo, directamente lo descartan debido a los prejuicios”, subraya Morraja.

La socia directora de Key Executive, Anabel Morraja

La socia directora de Key Executive, Anabel Morraja

Además, la empresa ofrece otra serie de servicios como desarrollo de talento, procesos de selección o headhunting. También trabajan en la elaboración de informes o una línea de negocio destinada a planes de igualdad laboral, todo ello orientado al sector público y privado.

-¿Qué es Key Executive?

-Somos una consultora de recursos humanos que nos diferenciamos por los servicios de outplacement y los programas de recolocación en los expedientes de regulación de empleo (ERE). Somos empresa autorizada por los servicios públicos de empleo. Cuando hay un ERE en el que se afectan a más de 50 personas, es obligatorio, desde la reforma laboral del año 2012, incluir un plan de recolocación que debe ejecutarse por una empresa autorizada.

-¿Qué ámbito territorial abarcáis?

-Somos una empresa global. Trabajamos en el ámbito regional y en la nacional: Madrid, Barcelona o Andalucía. Pero además, trabajamos con diferentes partners a nivel internacional en países como Inglaterra, Francia o Suiza. La empresa tiene sede en València y principalmente trabajamos a nivel nacional.

-¿Qué más servicios ofrecéis?

-Lo que más nos identifica es la parte de outplacemente y recolocación. Además, realizamos estudios y trabajamos en líneas de negocio dirigidos a planes de igualdad. Por ejemplo, en diciembre presentamos el “Estudio de Previsión de Empleo y Contratación y Necesidades de Formación 2020” para la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), un informe impulsado por la patronal en el marco del VI Pacto para el Empleo de la ciudad de València, un trabajo de campo realizado con la participación de empresas de València y de su área metropolitana, que llevamos realizando en los últimos cuatro años.

-¿Con qué sectores estáis acostumbrados a trabajar?

Trabajamos con grandes empresas prácticamente de todos los sectores, pero principalmente el agroalimentario, el del metal y servicios. Como ejemplo, en su momento llevamos el plan de recolocación del Banco de València.

-¿Cómo funcionan los programas de recolocación?

En la mayoría de los casos, partimos de una situación donde el sector va muy mal o incluso ha desaparecido. El enfoque es ver como se puede aprovechar la experiencia que la persona tenga en otro sector diferente. Esto normalmente ocurre en los perfiles más bajos. Por otro lado, nos contratan multinacionales y las mejores empresas de la Comunitat Valenciana, para ayudar a la recolocación de directivos que “salen”: director comercial, general o financiero. En estos casos, a las empresas lo que les importa el mensaje que la persona deja cuando se va y también la marca. Hay perfiles que son complicados de encontrar, de hecho, esto podría ser una herramienta de retención: “Mi empresa cuida a su personal hasta el final”.

-¿Cuáles son los perfiles de recolocación más complicados?

Los perfiles con mayor dificultad son aquellas personas que tienen más de 55 años y no tienen formación. No es tanto por la edad, es más por la formación y experiencia. El tema de la edad es más un prejuicio que tienen las propias personas de esa edad. De hecho, ahora llevamos un ERE en Castellón y estamos recolocando a todas las personas, y están en los cincuenta años. Hay necesidad en el sector y estas personas tiene experiencia, entonces las contratan.

-¿Y hay prejuicios por la edad de parte de los empresarios?

Si claro que la hay. Por eso nuestro papel es vender al candidato. Si un candidato, de esa edad, por sí mismo busca trabajo, directamente lo descartan. Nosotros lo que hacemos es hincapié en que ese profesional tiene una experiencia muy valiosa y hacemos que la empresa los vea de otra manera